martes, 2 de octubre de 2012

Absurda noche de Octubre.

Creo que pierdo el tiempo tratando de entender todo esto. Últimamente me eh sentido como Meursault. Creo que mi existencia es algo absurda como para seguir aquí. No se si realmente pertenezco a este entorno, no se quién es el hipócrita en este mundo. La rutina a veces me hace sentir tan solitario, a veces me hace sentir aun más absurdo de lo que ahora pienso. Marchas por todas partes, la búsqueda de una justicia social, la desconfianza en la gente con traje elegante o en los grilleros con su altavoz que se creen muy valientes al mentar madres en plena plaza pública, todo eso, no pasa de ahí. Intento entender todo esto observando mi entorno como cual niño observa hormigas con una lupa. El problema es que la hipocresía los hace cambiar el rumbo, su falta de sostenimiento en las ideas y convicciones hace que todo se vuelva absurdo. Suelo sentirme ajeno a esta sociedad, pero se que no lo soy. Muchas personas me aburren rápido reduciendo todo el circulo social que eh ido construyendo por necesidad. Siempre eh pensado que el hombre socializa por necesidad, que no es sociable por naturaleza. El sentido se me ha ido perdiendo poco a poco al descubrir que realmente nada lo tiene. Una desesperación toca a mis puertas y me doy cuenta de que estoy condenado a una libertad y no sé como pagar esa sentencia. ¿Qué podría construir para ser inmortalizado? No busco la eternidad realmente, solo creer que esta existencia no es tan absurda como pienso. Ya me he caído muchas veces y al levantarme, me doy cuenta de que todo sigue igual, que cada generación ha pedido un mundo nuevo, pero terminan construyendo el mismo con pequeñas diferencias apenas perceptibles. Oh pobre Meursault, sintiéndote tan ajeno a esta vida, a esta absurda vida que termina pudriéndonos las entrañas. A veces me suelo sentir como tú. 

[Perry O'Hara]